viernes, 26 de noviembre de 2010

¡Claro, los pajaritos!



Estar en el patio, comiendo mote, trabajando un rato y escuchando al Chincol cantar arriba de mi cabeza.
Es lo mejor de vivir en casa con patio.
¡viva!

martes, 23 de noviembre de 2010

John Lennon



En mi siesta de calor del día de hoy, se apareció entre mis sueños una imagen similar a estas fotos. Era como una mezcla de las dos...
Todo sucedió en las cercanías de un puerto Europeo en los años 60's. The Beatles y yo compartíamos un "Cartoné" 120 Viña Santa Rita Blanco -recuerdo perfecto la cajita verde- mientras recorríamos el lugar, cuando de repente a John Lennon se le ocurre invitar a los Carabineros a tomarse el Vino con nosotros. Yo no supe eso hasta que se lo llevaron detenido y pude pregunté qué era lo que ocurría, fue peor preguntar, porque parece ser que odiaban a las mujeres y me trataron pésimo; a John se lo llevaron y a mi me dejaron ahí mismo, me pusieron tornillos gruesos en las muñecas con una especie de esposas que perforaban la mano completa. Y por suerte ahí desperté! Todavía no le encuentro explicación al sueño, pero fue entretenido pasear con los Beatles.

domingo, 31 de octubre de 2010

es

Es una ternura, un amoroso, un detallista y un delicado que yo adoro. Sus patitas son una ricura y sus caricias lo mejor. Me gusta sentirlo y me gusta pensarlo, más sentir que pensar.

sábado, 30 de octubre de 2010

Hoy fuí como Bartleby en el Focus teclea que teclea.
Recordando a Luis Valenzuela por el libro, y María Fernanda de la O por Jerman Melville, mi hermana amada.

martes, 26 de octubre de 2010

Aprendí algo...

-Quizás si escondí mis sentimientos- dijo el caballero-. Pero no podía decir simplemente todo lo que se me pasaba por la cabeza y hacer todo lo que se me apetecía. Nadie me hubiera querido. -El caballero se detuvo al pronunciar estas palabras, pues se dio cuenta que se había pasado la vida intentando agradar a la gente. Pensó en todas las cruzadas en las que había luchado, los dragones que había matado, y en las damiselas en apuros que había rescatado: todo para demostrar que era bueno, generoso y amoroso. En realidad, no tenía que demostrar nada. Era bueno, generoso y amorso.


Lo bueno de esto es que, siento que me estoy dando cuenta -y hacen que me de cuenta- de las cosas que puedo mejorar ahora, que solo tengo 20 años..ya bueno, 21. No tendré excusas para cuando siga cumpliendo años, seré una mejor persona para poder entregar lo necesario a mis hijos!

Gracias a él y la que hicieron que abriera los ojos sobre esto.